Las bolsas parpebrales y las ojeras son motivo frecuente de consultas relacionadas con el envejecimiento facial acelerado. En ocasiones, la edad, el exceso de sol, la falta de cuidados cosméticos y la herencia provocan un aumento de las bolsas grasas de los parpados superiores e inferiores. Estas a su vez hacen dilatar y contraer la piel de los parpados, provocando en ella arrugas, flacidez y un deterioro mas acelerado de la estética de esta piel en relación al resto de la piel de la cara.
Las ojeras se van haciendo mas evidentes a lo largo de este proceso, que culmina con bolsas parpebrales exageradas acompañadas de piel arrugada y dilatada que dan aspecto de “cansada/o” a la cara.
Hasta hace muy poco, solo la cirugía podía corregir este problema, tan frecuente en hombres como en mujeres. Con la aparición de nuevos materiales de relleno como el Acido Hialurónico No Reticulado, especifico para el tratamiento de estas áreas, podemos reducir considerablemente tanto las inestéticas ojeras, como al mismo tiempo realizar una hidratación profunda de la piel de los parpados superiores e inferiores, todo ello sin dolor ni cardenales y en una única sesión, gracias al empleo de las nuevas microcánulas de infiltración y a la utilización de dispositivos de frío Cool Sense, que hacen que el tratamiento sea totalmente indoloro.
El tratamiento se realiza en unos 20 minutos y el paciente puede reincorporarse a su rutina de forma inmediata.